Industria científica y técnica de Armenia y autorrealización

Como persona que nació y creció fuera de Armenia y visitó el país periódicamente durante mi infancia, tenía una conexión con Armenia, pero no era lo suficientemente fuerte. Sin embargo, tenía un objetivo: contribuir al desarrollo de Armenia. Por eso, cuando tuve la oportunidad de participar en el programa Birthright Armenia, decidí aprovecharla.

LLEGADA A ARMENIA

Cuando me licencié en Ciencias de los Materiales por la Universidad de Moscú, compré inmediatamente un billete para Armenia y llegué a Ereván al día siguiente. Lo decidí porque tenía claro que debía empezar mi carrera en Armenia para ayudar a mi país y a la gente que vivía allí. Pasé el primer mes lejos de mi familia y mis amigos buscando trabajo, pero las opciones que me ofrecían no se ajustaban del todo a mis necesidades profesionales. Entonces tuve la suerte de oír hablar del programa Birthright Armenia a un amigo mío. Pensé que era una buena oportunidad tanto para mi crecimiento personal y profesional como para sumergirme en la cultura y el alma de Armenia.

VECTOR DE DESARROLLO DE ARMENIA

Pensaba contribuir al desarrollo de Armenia invirtiendo mis esfuerzos en el crecimiento de su industria científica y tecnológica, lo que a su vez repercutiría positivamente en la situación económica del país y estrecharía la cooperación con otros países del mundo, mejorando así el nivel de vida de todos los ciudadanos armenios.

Como me dijo el director de mi centro de prácticas: "Si todos los empresarios vienen a Armenia y crean una empresa aquí, nuestro país sólo saldrá beneficiado". Y me he dado cuenta de que está ocurriendo ahora mismo: muchas empresas científicas y técnicas fundadas por armenios de la diáspora se han trasladado a Armenia y están trabajando aquí de forma efectiva, personas de la diáspora están utilizando sus conocimientos y experiencia para crear empresas emergentes, muchos científicos y especialistas con experiencia internacional están viniendo a Armenia para trabajar en las universidades locales. Todos estos hechos son inspiradores porque la diáspora, que sigue manteniendo una conexión con los países en los que nacieron, están abriendo nuevas oportunidades tanto para ellos como para la gente de Armenia y contribuyen al auge de la economía, la educación y el interés de la gente por la ciencia.

MI EXPERIENCIA DE PRÁCTICAS Y NUEVAS OPORTUNIDADES

Gracias a mi variada experiencia -desde el desarrollo de materiales para motores de aviones hasta el trabajo en una startup médica-, los responsables del programa encontraron rápidamente un lugar de prácticas para mí teniendo en cuenta mis necesidades profesionales. Para mis primeras prácticas, me ofrecieron unirme a una joven empresa biomédica, Foldink, dedicada a la bioimpresión 3D de órganos artificiales. Participé en la configuración de los parámetros de la bioimpresora y en la elaboración de informes sobre las propiedades de los biomateriales sintetizados de diversas formas.

Mi segundo lugar de prácticas fue una empresa de tecnología médica, AIP scientific, que trabajaba en el desarrollo de métodos de creación de implantes óseos y fabricación directa. La empresa fue fundada por armenios de la diáspora, por lo que su historia es muy corriente. Se trasladaron de Estonia a Armenia hace varios años, trayendo consigo toda la experiencia, los conocimientos y las ganas de beneficiar a la gente que tenían. Sus actividades son especialmente demandadas ahora que muchos refugiados de Artsaj necesitan ayuda médica. Al principio, durante un breve periodo, ayudé en la fabricación de implantes óseos de titanio para pacientes con traumatismos craneales. Luego me ofrecieron asumir un nuevo proyecto como voluntario: desarrollar métodos de impresión en 3D de materiales cerámicos para electrónica espacial en el marco de la investigación aeroespacial internacional. Teniendo en cuenta la gran envergadura de los futuros proyectos de esa empresa y sus impresionantes resultados, me di cuenta de que la empresa tenía un enorme potencial, y la cooperación con ella me ayudaría en mi desarrollo profesional. Dos meses después me ofrecieron un puesto fijo como gestor de proyectos. Me alegré tanto y acepté de inmediato, porque era una gran oportunidad para seguir profundizando en las áreas científicas que me interesaban, así como para comunicarme con especialistas experimentados y mejorar mis competencias profesionales.

EL IMPORTANTE PAPEL DE LA DIÁSPORA EN EL FUTURO DE ARMENIA

Después de pasar casi 6 meses en Armenia y 4 meses con Birthright Armenia, mi deseo de ayudar a mi país se transformó en un objetivo claro. Ahora entiendo firmemente por qué estoy aquí. Como voluntario, no sólo he reforzado mi conexión con mi patria histórica, sino que también he aprendido sobre la estructura del país, las ventajas y los problemas que hay que resolver en el camino hacia un estado próspero.

A pesar de todas las dificultades a las que se ha enfrentado Armenia, creo que mi patria tiene un futuro brillante. Viendo cómo ha cambiado Armenia en los últimos 9 años gracias al entusiasmo y los esfuerzos de los armenios de todo el mundo, me alegro enormemente de haber podido contribuir al desarrollo de la industria científica y técnica de mi país. Aliento a los representantes de la diáspora que son especialistas en diversos campos -desde la ciencia y la tecnología hasta el arte y la política- a que vengan aquí, compartan experiencias y conocimientos, y formen parte de los esfuerzos que convertirán a Armenia en un país próspero y feliz.

Al fin y al cabo, la forma más segura de conseguir este estado próspero es tomar la iniciativa en sus propias manos.