Mi misión para Armenia nunca se ha cumplido. Siempre hay mucho más para realizar y lograr, más viajes que emprender, más iglesias que explorar, más pueblos y ciudades que visitar, más picos de montañas que escalar, más amigos que conocer... ¡Un sentimiento con mil palabras combinadas!
MI VOLUNTARIADO COMENZÓ VIRTUALMENTE
Todo comenzó con mi proyecto de voluntariado virtual cuando se impuso la cuarentena obligatoria, y la oficina de Birthright Armenia me prometió la oportunidad de hacer el voluntariado una vez que terminara el encierro. Después de 2 años, continué la misión incumplida con el destacado personal de la empresa ICARE que me acogió una vez más para finalizar el proyecto del Campamento AGRI. En un corto período de tiempo, el sentimiento de integración en mi cultura tanto con los becarios de Birthright Armenia como con los colegas de práctica voluntaria fue la mejor manera de ampliar mis horizontes de networking, descubrir las diferencias y similitudes de las perspectivas culturales y abrazar la belleza de la diversidad; desafié las probabilidades encontradas y aproveché las oportunidades de aprender e invertir más.
¡Ese es sólo el comienzo de mi viaje en la PATRIA!
Gracias Birthright Armenia ❤️
¡Con un amor del tamaño de Ararat!