Gracias por decir “sí” al amor

Por extender los brazos tan ampliamente, como un pájaro extiende sus alas para cubrir y proteger a todos sus niños.

Ustedes realmente sacaron lo mejor de nosotros, enseñándonos cómo amar, cómo cuidar, cómo crear significativos y poderosos vínculos, al menos tratá de hacerlo y no tengas miedo de vivir. Cómo vivir y no solo existir.

En las complejidades íntimas de todo esto y en las pistas ocultas más profundas de alguna manera hiciste que fuera más fácil navegar sobre este laberinto. En la búsqueda perpetua de todo esto, con el sonido constante, lograste aliviar la carga. También agregaste mucho más dolor, pero qué espléndido de tu parte hacernos sentir vivos, todo el tiempo. Tratando de recordar lo que hemos olvidado.

Fuerte pero tan gentil. Feroz, pero tan compasivo.

Hogar es donde duele mi corazón. Y donde lloramos más. Y donde me siento más vivo que nunca.

Yo intento pensar en mi mejor y más fuerte recuerdo de Armenia y mi mente me deja un espacio en blanco. ¿Fue cuando bailábamos danzas hermosas y cantábamos nuestras canciones todo el día y noche? Cuando finalmente encontraste un sentimiento de “pertenencia”, tu círculo, tu consuelo, tu amor e inspiración - ¿todo en un pequeño momento, en un rincón? Cuando te acostumbras a escuchar todas las mañanas “բարի լոյս", no significa que seas el amanecer de alguien, la razón de alguien para levantarse y brillar hoy. ¿Cuando encuentras paz y calidez en una iglesia un domingo mientras sentís el eco de miles de oraciones debajo de tu piel?

EL DÍA QUE HIZO “1 MES” EN ARMENIA, HICE UNA NOTA:

“Hace un mes estando en Armenia… no importa. El tiempo no importa más.

Un mes, dos meses, tres meses… nada iba a cambiar mi perspectiva de este sentimiento y el concepto de “hogar” que estuve buscando toda mi vida.

Ellos dicen que es difícil vivir sin un hogar. Como un árbol desarraigado. No es fácil, pero lo encuentro liberador.”...

¿Fue el momento que te das cuenta que conoces mejor las calles que 3 semanas atrás, cuando conoces mejor las letras de las canciones que amabas desde niño y ahora podes cantarlas abiertamente, desde el fondo de tus pulmones? ¿Cuando cada gesto y cada aliento estaban llenos de amabilidad, elegancia y calidez junto con autenticidad y cuidado? ¿Cuando sentiste el beso del sol en tu piel y en tu alma cada mañana? El país del sol eterno…

¿El momento de una decisión crucial, cuando tus ojos se encontraron con esos ojos marrones oscuros y entendes al otro sin las palabras? ¿Cuando tus amigos te limpian las lágrimas porque sienten el dolor de la misma manera que vos? Cuando no podes dormir hasta las 5 am porque, ¿cómo vas a dormir con esta avalancha de emociones que te atormentan por las venas?

Estoy recolectando estos recuerdos como brillantes diamantes en un hilo delgado, con tanto miedo de perderlos o romperlos a alguno de ellos, son tan frágiles, tan preciosos.

Gracias por darme un sentido de propósito en un mundo donde parece que ya no hay suelo debajo de tus pies. Hay algunas cosas en la vida tan hermosas y profundas que duelen. Y cada lágrima es un sanador. Todos estamos caminando unos con otros a casa. BR, gracias por cambiar nuestras vidas.

“Quizás sonreímos más en la oscuridad porque la oscuridad anhela nuestra luz”.

Armenia, te amo más de lo que nunca sabrás…